La Unidad Regional de Rehabilitación en Colotlán se quedó sin la persona capacitada para realizar las terapias físicas, situación que originó la suspensión de labores desde hace dos meses y que preocupa a los usuarios, quienes argumentan que de no continuar con su tratamiento retroceden en el mismo y esto afecta su salud.
Al respecto, Graciela Montoya, quien se encargaba de ofrecer las terapias a las 60 personas que acudían semanalmente a la Unidad de Regional de Rehabilitación, aseguró que tomó la decisión de renunciar porque el gobierno actual pretendía disminuirle el sueldo.
“Decidí renunciar porque la esposa del Presidente me dijo que no había dinero para pagarme, yo ganaba 3 mil pesos a la quincena y me querían rebajar 400 pesos, aunque le expliqué a la Presidenta del DIF, ella no me dio ninguna alternativa y sólo dijo que no había presupuesto para cubrir mi sueldo”, señaló la ex terapista.
Además del caso de Graciela Montoya, el cambio de autoridades municipales también afecto a Erika Sánchez, encargada de realizar la limpieza del lugar, quién argumentó ser despedida injustificadamente y sin ninguna explicación.
Por su parte, Lorena Medina Hernández, directora del DIF Colotlán, confirmó el paro de labores e indicó que no reanudarán el servicio en tanto no se cuente con personal capacitado para brindar las terapias, por lo que dijo, se envió a una enfermera a Guadalajara, para que se capacite. Sin embargo, sería hasta marzo cuando la Unidad vuelva a brindar servicio.
Texto e imagen: Hilda Becerra.
Al respecto, Graciela Montoya, quien se encargaba de ofrecer las terapias a las 60 personas que acudían semanalmente a la Unidad de Regional de Rehabilitación, aseguró que tomó la decisión de renunciar porque el gobierno actual pretendía disminuirle el sueldo.
“Decidí renunciar porque la esposa del Presidente me dijo que no había dinero para pagarme, yo ganaba 3 mil pesos a la quincena y me querían rebajar 400 pesos, aunque le expliqué a la Presidenta del DIF, ella no me dio ninguna alternativa y sólo dijo que no había presupuesto para cubrir mi sueldo”, señaló la ex terapista.
Además del caso de Graciela Montoya, el cambio de autoridades municipales también afecto a Erika Sánchez, encargada de realizar la limpieza del lugar, quién argumentó ser despedida injustificadamente y sin ninguna explicación.
Por su parte, Lorena Medina Hernández, directora del DIF Colotlán, confirmó el paro de labores e indicó que no reanudarán el servicio en tanto no se cuente con personal capacitado para brindar las terapias, por lo que dijo, se envió a una enfermera a Guadalajara, para que se capacite. Sin embargo, sería hasta marzo cuando la Unidad vuelva a brindar servicio.
Texto e imagen: Hilda Becerra.